Ante la incertidumbre política de Estados Unidos, migrantes de América Central y del Sur fijan su esperanza en México, que en abril recibió 9.189 peticiones en la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), la cifra mensual más alta de su historia.
La ilusión de un futuro mexicano es palpable en Casa Mambré, un alojamiento para solicitantes de asilo en el que Roxana Villafuerte espera desde hace casi un año que la Comar resuelva su trámite para que pueda trabajar y mantener a su bebé, de nueve meses y de padre mexicano.
Roxana, al igual que 53 % del total de peticionarios de asilo en México -81 % en el caso de salvadoreños- huye de la violencia de las pandillas, según un reciente estudio del Colegio de la Frontera Norte.
«Así se me dieron las cosas, no tuve opción de decir ‘me quedo o veo qué hago’, la única opción era salir de mi país», cuenta la mujer.
La Comar recibió 31.842 solicitudes de asilo en el primer cuatrimestre de 2021, un aumento de casi 75 % frente a las 18.142 del mismo periodo de 2020 y las 18.527 de 2019.
Honduras encabeza las peticiones con 15.842, seguido por 4.315 de Haití, 3.091 de Cuba, 2.460 de El Salvador, 1.818 de Venezuela, 1.615 de Guatemala, y el resto de otros países latinoamericanos.