Fue un hecho histórico en San Luis Potosí… El dolor, el coraje, la sed de justicia y el grito desesperado de las mujeres se hicieron presentes nuevamente en las calles de la capital del estado, pero esta vez dejaron una huella imborrable.
La estatua de la joven Karla Pontigo, asesinada en 2012 fue colocada frente a Palacio de Gobierno y Congreso del Estado, en una esquina de la Plaza de Armas, un sitio muy concurrido por potosinos y turistas.
Ahí, quedará para la historia la pieza de metal que simboliza la violencia feminicida que se vive en el Estado de San Luis Potosí.
En un acto que enchinó la piel de propios y extraños, entre flores y la luz de las velas, las consignas de las madres, activistas, colectivos, de las potosinas retumbaron otra vez, entre la cantera y el adoquín que visten el Centro Histórico de la ciudad.