La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, convocó a sus simpatizantes en Ciudad de México para celebrar sus primeros 100 días en el poder, marcados por las amenazas del próximo mandatario estadounidense, Donald Trump, la narcoviolencia en Sinaloa (noroeste) y más de 10 reformas constitucionales.
Sheinbaum, que se convirtió en la primera mujer al frente del Ejecutivo mexicano el 1 de octubre de 2024, rendirá su primer informe de gobierno como presidenta, un rito en la vida política mexicana.
Los observadores estarán atentos a lo que pueda decir sobre la futura relación con el presidente Trump, quien asumirá el poder una semana después, el 20 de enero.
Ha asegurado que tendrá una «buena relación» con el magnate estadounidense, quien prometió imponer aranceles de al menos 25% a las exportaciones de México si éste no detiene la «embestida de criminales y drogas» y anunció una deportación masiva de migrantes.